Cambios

¿Por qué cuestan tanto los cambios?¿Por qué las cosas no son simplemente blancas o negras, y se empeñan en ser grises con miles de matices?¿Por qué se siente tristeza y alegría a la vez? 

Sí, así estoy yo, preguntándome todo esto, y deseando que todo fuera más sencillo. Estoy dividida, partida en dos: entusiasmada con un nuevo proyecto, pero triste por dejar otras cosas atrás. No puede ser todo a la vez, tengo que escoger. Y ya escogí: sigo adelante y empiezo una nueva etapa, aunque con un nudo en la garganta, que de vez en cuando acaba en lágrimas. Me mudo, cambio de ciudad, y espero que sea para mejor...Pero dejo atrás lo que ha sido mi casa durante 4 años. No sólo eso, me alejo, pero sólo un poquito, y sólo físicamente, de quién representa la persona más importante en mi vida: mi madre. Sé que está triste, pero lo que más me duele es que soy yo la causante de esa tristeza, y no puedo dejar de sentirme culpable. Supongo  que  es el peaje que tengo que pagar mientras intento encontrar qué es lo que quiero.